Pues efectivamente se ha abierto, al menos en Ekaterimburgo, la temporada de patinaje libre.
Estamos en el minuto 1 del invierno y, quien os escribe, ya ha dado con sus huesos en el suelo gracias a una cabriola con doble tirabuzón en plena pista de patinaje … es decir, en la calle.
Estamos en el minuto 1 del invierno y, quien os escribe, ya ha dado con sus huesos en el suelo gracias a una cabriola con doble tirabuzón en plena pista de patinaje … es decir, en la calle.
El caso es que eran las 7:50 de la mañana. Estaba a apenas 200 metros del portal de la oficina cuando, de repente, me llega un mensaje de móvil. La mala suerte hizo que, en esas décimas de segundos que se tarda en apretar el botón para abril el mensaje, mis suelas (maravillosas sí, pero fabricadas y diseñadas es Inca, muy lejos del hielo) entraran en contacto con el líquido elemento en estado sólido, provocando, inmediatamente, una derrapada digna del mismísimo doctore (que grande Rossi!) y la posterior caída (al más puro estilo de Fonsi Nieto). No hay parte de daños ya que lo único a reseñar es que terminé con las palmas, y parte del abrigo, llenos de mierda, que es lo único que hay ahora por la calle (y perdón por la expresión).
Y de quién era el mensaje??? Pues del BANCO!!! Como al salir de casa saqué dinero de un cajero, me informaban sobre la operación realizada. Me **** en el sistema financiero!!! Jejejejejee
Saludos!
1 comentario:
Quinet, veo que sigues bien pese a las caidas jejeje
Yo te imaginaba un poco cayendo a lo salinas jeje.
Un abrazo y cuidate.
Edu.-
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